Atacaron a piedrazos el colectivo de Los Caligaris


Ocurrió en la zona de la Circunvalación, en el Puente a la altura de Capdevila. No se trata de un hecho aislado ya que han ocurrido situaciones similares en el último tiempo.


En la zona de Circunvalación, a la altura del kilómetro 34 (en el Puente a la altura de Capdevila), el colectivo en el que viajaba la banda cordobesa Los Caligaris sufrió un ataque de pierdas mientras iban de camino a Devoto.

«Estábamos nosotros arriba y se escuchó el impacto de la piedra», contó Martín Pampiglione en las redes sociales de la banda. Mientras que Mauricio Ambrosi agregó: «Tengan cuidado, no anden por esa zona. La verdad que la inseguridad es alto flagelo, pero estamos sanitos».

No se trata de un hecho aislado, sino que desde hace tiempo la Circunvalación y otras rutas a la salida de la Capital Provincial son escenario de ataques con pedradas o cascotes contra los vehículos (sin importar el tipo que sea).

La intención es lograr reventar el parabrisas para obligar a que los conductores no puedan ver y tengan que frenar metros más adelante, momento que aprovechan los delincuentes para asaltar a sus víctimas (algo que por lo general sucede de noche o madrugada).

En el episodio sufrido por Los Caligaris fue un ataque al azar. El proyectil dio en la parte delantera del rodado, pero el conductor no se detuvo hasta que el riesgo pasó.

En el video casero, uno de los miembros señala que la Policía se presentó de manera inmediata apenas notificaron lo ocurrido. Sin embargo, el hecho no fue informado a la prensa.

En la noche previa, un agente de la Policía Caminera sufrió una herida cortante en la mandibula cuando circulaba por el anillo interno de la Circunvalación a la altura del kilómetro 34 y recibió el impacto de una piedra en la cara. Según informaron, sucedió cerca de la pasarela que une barrio General Deheza y Villa El Tropezón.

Unos individuos arrojaron una piedra que ingresó por la ventanilla derecha del patrullero e impactó de lleno en la mejilla del cabo Maximiliano Di Francesca. Por las heridas, se requirió sutura, perdió un diente y tuvo un traumatismo de tórax. Posteriormente montó un operativo, pero no hubo detenciones.

En enero pasado, un joven de 19 años recibió el impacto en la cabeza de una importante piedra, cuando iba en auto con su padre. El cascote fue uno de los tantos que lanzaron los delincuentes contra el vehículo en la avenida de Circunvalación y el cruce con el Camino a 60 Cuadras, en la franja sur de la ciudad de Córdoba.

«Lo desmayó en el momento, se me cayó en los brazos», comentó el papá Gustavo Arias. Desesperado, y sin detenerse, el hombre encaró hacia el hospital Florencio Díaz, a donde llegó tocando bocina. Ya en el centro médico, el joven recibió atenciones y los cuidados médicos.

En su mayoría, los ataques son cometidos en la Circunvalación, donde la Policía Caminera está presente. Sin embargo, esta dirección generalmente hace controles fijos o móviles, pero por velocidad o cuestiones de tránsito, entre otras cuestiones. Allí radica el problema.

No siempre hay móviles del Comando de Acción Preventiva (CAP) o de Motos realizando esas tareas: prevención o represión del delito en esa arteria vital de circulación.

Cuando una o un automovilista es atacado a pedradas, de manera extraoficial, la Caminera por lo general se excusa de que su función es controlar la velocidad y no hacer la prevención del delito. Se sostiene que esa acción le corresponde al CAP.

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