Iona sobre Lourdes Fernández: «Hago la denuncia para protegerla, aunque me odie, está en peligro y todos lo pensamos”
A su vez la amiga de la ex Bandana, Lissa Vera, sentenció: «la prefiero ofendida y viva, que contenta y muerta». Por su parte, la madre expresó: «A ver, si no la tengo que ver por tres años, pero ella está bien, no me importa”.
El día de ayer, se vivió un fuerte episodio cuando luego de casi 12 horas sin saber nada, la Policía de la Ciudad de Buenos Aires encontró el jueves por la noche a Lourdes Fernández.
Estaba en el departamento de su novio, Leandro Esteban García Gómez, ubicado en la calle Ravignani del barrio porteño de Palermo.
La madre de la artista que fue integrante del grupo musical Bandana, junto a otros allegados, habían denunciado por la mañana de dicho día su desaparición y habían alertado a las autoridades sobre un posible caso de hostigamiento y violencia de género.
Esta había indicado que no sabía nada de su hija desde el 4 de octubre, y que temía por ella.
La policía había visitado el departamento de Gomez, pero este no les habría dejado recorrer el lugar.
Con la suma de la denuncia de Lissa Vera, compañera de la banda, en la Fiscalía de Género, se pudo incentivar la intervención de las autoridades.
La cantante había subido una historia a Instagram asegurando que se encontraba bien y más tarde, tuvo una videollamada con el área de Búsquedas de Personas donde reafirmó los dichos pero no indicó dónde estaba.
Fue necesaria una orden de allanamiento dispuesta por el Juzgado Nacional y Correccional 47 para que pudieran ingresar y encontrar a la mujer, de 44 años de edad.
Según informaron varios medios, Lourdes fue encontrada bajo los efectos de drogas que le habrían suministrado para mantenerla retenida. Fue atendida de urgencia por el SAME y trasladada en ambulancia al Hospital Fernández
Leandro Gomez, de 47 años, no estaba en el domicilio, pero fue detenido minutos después dentro del edificio. Los investigadores creen que el hombre pretendía escapar por la terraza.
Fue imputado por la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional 28, subrogada por el fiscal Patricio Lugones, por “privación ilegítima de la libertad”.
Lourdes, tras firmar el alta del centro de salud, se fue a la casa de una amiga. Además, se supo que no tendrá ni consigna policial ni botón antipánico.
Las palabras de las amigas
Lissa Vera, quien se presentó en Tribunales a hacer la denuncia, frente a los medios habló con angustia y señaló directamente a García Gómez: “Tengo miedo por ella, tengo miedo de las consecuencias, porque no se sabe dónde está. Su ex es muy peligroso, ahora me asusta, es el momento de hablar y dejar de fingir demencia porque la próxima noticia puede ser otra”.
“Ayer no la escuchamos bien, hay un video donde no la vimos bien, tenía una situación de garganta que es extraña. Hago la denuncia para protegerla, aunque me odie, está en peligro y todos lo pensamos”, detalló antes de encontrar a Lourdes.
Previo de ingresar al recinto judicial, cerró con una frase que se viralizó rápidamente: “Yo la prefiero ofendida y viva, que contenta y muerta”.
Por otro lado, Ioja, mejor amiga de la cantante, denunció en los medios que días atrás había visto a la cantante con fuertes golpes y moretones, provocados por Leandro García Gómez.
En diálogo con los medios,hizo pública la situación con el fin de que la Justicia actúe rápido: “Denunciar al violento maltratador en todos los medios, para que la justicia ponga cartas en el asunto, como la tomaron, y que ella deje de estar con ese psicópata, porque imaginate que mientras ella seguía atada a un gran vínculo, él podía llegar hasta a matarla. O sea, que ese es el único final que se iba a avecinar”.
“Como toda persona que está inmersa en un vínculo traumático, tóxico, obviamente ella es la víctima, no tiene culpa de absolutamente nada de lo que él le hizo. Es muy difícil salir”, lamentó.
Si bien aclaró que no conoce personalmente a Leandro García Gómez, relató que en ocasiones el empresario impedía el contacto entre ella y la cantante:
“Lo conozco por todas las cosas que ella me contaba que le hacía y el día de antes de ayer yo le mandé un mensaje a Lourdes porque ya no la podíamos encontrar y él se metió en el audio. No necesito conocerlo para saber que es un violento maltratador, un misógino y rancio. Así que estoy muy feliz de que haya sido detenido”.
Además, reveló el paso a seguir tras la detención de la ex pareja de su amiga: “La idea un poco sería hacer que una intervención para que Lourdes pueda salir de las adicciones y de toda esta situación, que es la peor situación de su vida”.
En ese sentido, Ioja contó que en los últimos días Lourdes había intentado poner fin a su relación y buscaba retomar su carrera profesional lejos del control de su pareja.
A su vez, contó que decidió hacer pública la situación al notar algo extraño en el video que Lourdes difundió en sus redes, donde intentó dejar en claro que “estaba bien”: “Yo creo que ninguna persona que la conoce a Lourdes puede decir que Lourdes estaba ayer, por más que diga: ‘Estoy bien’, estaba bien. No está en sus cabales. Lourdes está en la situación de una enfermedad psicológica, espiritual, emocional, más todo lo físico y la enfermedad que ella es que, que fue operada. Su salud está bastante delicada”.
Las palabras de la madre
Mabel López habló con los medios y dijo: “Ella no está sola. Está acompañada por amigas. Todavía tiene que hacer el proceso de entender lo que se generó ayer”.
Sobre la salud de Lourdes, comentó: “No le creo nada a mi hija porque sé cómo viene la mano”, haciendo referencia al contexto de manipulación en el que estaría inmersa la cantante.
Además confesó que su hija está enojada con ella luego de acudir a la justicia, y afirmó: “Si ella no me quiere ver, pero está bien, no me molesta”.
Ante la pregunta de si no quería ir a la casa en la que está Lourdes, Mabel fue contundente: “No, porque respeto sus tiempos, respeto sus sentimientos. Ella ahora está en una realidad emocional y nadie le puede decir ‘Ay, no sientas eso’. El sentimiento está, sea bueno o malo”.
Contó que todo comenzó a principios de año, cuando notó marcas en el cuerpo de su hija y decidió acudir a la fiscalía: “Ahí yo me entero de que había otra denuncia en enero o febrero por una vecina debido a violencia y que tenía otra causa”, dijo refiriéndose a García Gómez.
A partir de ese momento, la relación entre madre e hija se tensó.
“Ahí yo le digo a Lourdes, escúchame, ¿le estás pidiendo perdón? Bueno, un montón de cosas, y ahí nos dejamos de hablar porque yo le dije en un audio: ‘Por ahora no quiero saber nada más de vos, porque tenía que procesar eso’”, detalló la mujer.
Intentaron retomar el vínculo meses después:
“Llega octubre, se acerca mi cumpleaños, yo cumplo el 3, hacíamos la fiesta el 4. Ahí, en medio como que empezamos a hablar, le mando la invitación, porque no nos mandábamos nada. Le mando la invitación: ‘¿Vas a venir?’. Entonces llega a la fiesta el 4 de octubre”.Sin embargo, notó algo extraño en su hija: “Ella no llega bien, se quejaba de dolor de costilla, porque dice que se cayó de la escalera. Yo le vi como unas manchas, pero yo estaba en otra realmente en la fiesta. La que sí le notó esas lesiones fue Anita”, relató, en referencia a su otra hija.
Para el Día de la Madre no se encontraron y el miércoles 22 le enviaron audios de ella hablando de mala manera, sin poder articular.
Al no tener noticias de su hija, actuó y realizó la primera denuncia que desencadenó en lo sucedido el jueves 23 de octubre.
“Hablo con Yamil, que es el abogado de ella. Él estaba preocupado porque realmente no sabíamos dónde estaba. Me empiezan a llamar las chicas de Bandana: ‘¿Dónde está? ¿Dónde está?’. Él presenta un escrito y me dice: ‘Andate a la UVD’. Voy a la UVD, 7 y media me atienden. Yo no entendía cómo podía hacer yo una denuncia, porque tenía entendido que la víctima tenía que hacerla. Entonces ahí me dicen que la cosa cambió, que yo puedo ser querellante”, contó.
Continuó: “Y entonces le digo: ‘Bueno, ¿y esto qué me habilita?’. Y ahí me empiezan a decir: ‘Esto te habilita a pedir una medida perimetral contra él’. Listo, la quiero. ‘Te habilita a pedir una pericia para ella, en qué estado está y eventual tratamiento’. Listo, la quiero. Entonces yo ahora soy la querellante de él”.
Al ir al hospital al ver a su hija, ella no quiso recibirla: “Yo entendía perfectamente la situación. Dejó muy en claro que no me quería ni ver, no la vi. A ver, si no la tengo que ver por tres años, pero ella está bien, no me importa”.
La historia de violencia en la pareja
Según informó Infobae, Lourdes y García Gómez comenzaron a salir hace cinco años y en paralelo, comenzó una historia de maltrato.
Fue en 2022 cuando la artista presentó la primera denuncia contra él por lesiones leves.
En ese entonces, Fernández publicó un video en su cuenta de Instagram con su cara golpeada donde contó lo que ocurrió: “Todos en el edificio escucharon. Según él, gritaba porque tenía ataques de pánico. Si pasa, DENUNCIEN, no tengan miedo”, dijo, relatando una situación puntual de la que no dio detalles.
Y continuó: “Me filmó sin que yo sepa. Me sacaba fotos desnuda sin mi consentimiento. Me metía cosas en la bebida y yo siempre pidiendo cosas porque ‘me emborrachaba’. Amor es la falta absoluta de sufrimiento. El amor no duele”.
Lourdes y el agresor volvieron a tener vínculo después de esa denuncia. Y este año, otro hecho de violencia obligó a la cantante de Bandana a radicar una nueva presentación judicial contra García Gómez.
Fue el 1 de octubre, cuando la Policía acudió al domicilio donde convivían tras una fuerte discusión entre ambos. Fue luego de que vecinos del edificio llamaran al 911. Este episodio derivó en que el hombre se fuera de la casa.
Fuentes: Infobae / Cadena 3 / Canal 26 / Río Negro / TN / La Nación / Canal C