Arroyito fue declarada «Ciudad amiga de Veteranos de Guerra de Malvinas»
La localidad cordobesa albergó el 8º Encuentro Nacional de Veteranos y Tripulantes del Portaaviones ARA 25 de Mayo a 40 años de la gesta malvinense.
El pasado sábado 8 de octubre la ciudad de Arroyito fue sede del 8º Encuentro Nacional de Veteranos y Tripulantes del Portaaviones ARA 25 de Mayo. La conmemoración fue por los 40 años de la gesta malvinense.
Dante Bergese fue quien llevó la propuesta al municipio local donde desde el momento cero se pusieron a trabajar en equipo para recibir de la mejor manera a cada uno de nuestros Héroes de Malvinas.
Arroyito, fue declarada por la comisión directiva que trabaja en la memoria del portaaviones: «Ciudad amiga de Veteranos de Guerra de Malvinas».
La importancia del portaaviones en la historia.
El ARA Veinticinco de Mayo fue protagonista de varios eventos que le sumaron cierta popularidad. Entre ellos se destacó en 1972, cuando una vez arribado en el puerto de Nueva York en los Estados Unidos, realizó la audaz tarea de embarcar dieciséis aviones de caza y ataque Douglas A-4Q, con munición y carga de distinta naturaleza. Su desempeño fue notorio y logró destacarse frente a una de las flotas más importantes del mundo.
Otro hecho memorable se dio en 1978, cuando el portaaviones fue enviado a la zona de conflicto encabezando una importante flota de buques de superficie y submarinos. El Conflicto del Beagle entre Argentina y Chile, en escalada, parecía tomar proporciones y características típicas de un conflicto armado y la presencia del portaaviones ARA Veinticinco de Mayo en su Operación Soberanía, desplegaba todo su orgullo preparado para defender los intereses de la Nación. Sin embargo, el hecho sufrió una distensión luego de la intervención del Papa Juan Pablo II, retornando la flota desplegada, nuevamente a la Base Naval Puerto Belgrano.
El 2 de abril de 1982, el portaaviones ARA Veinticinco de Mayo, desembarcó en Malvinas para luchar en la Guerra de las Malvinas contra los ingleses. Su desempeño fue activo y estelar, y el mismo le valió una condecoración.
Gracias al portaaviones, la Armada Argentina pudo cubrir y desplegar a su GAE (Grupo Aéreo Embarcado), del COAN, de una manera que no hubiese sido posible hacer desde tierra firme.