Científicos de la UNC descubren un biomarcador que ayudaría en los tratamientos de cáncer
Se trata de la molécula CD39 que se expresa en células del sistema inmune denominadas Linfocitos T CD8 Exhaustos. Estas tienen un papel fundamental en la respuesta inmune frente a dicha enfermedad.
Un equipo científico del Departamento de Bioquímica Clínica del Cibici descubrió una molécula que puede funcionar como biomarcador de distintos tipos de cáncer.
El hallazgo realizado en la Universidad Nacional de Córdoba abre numerosas líneas de investigación vinculadas a no solo el cáncer de mama, sino también a melanomas, cáncer de vejiga y de pulmón, entre otros.
Se trata de la molécula CD39 que se expresa en ciertas células del sistema inmune, que se denominan Linfocitos T CD8 Exhaustos.
Este tipo de célula inmunitaria es fundamental en la defensa contra diversas patologías. Desde oncológicas hasta infecciones por virus.
Los investigadores demostraron que los tumores de pacientes con cáncer de mama estaban infiltrados por Linfocitos T CD8, que expresaban la molécula CD39.
Estos linfocitos se denominan exhaustos o agotados, pues pierden algunas funciones efectoras. Pero sin embargo adquieren otras potencialidades. Los especialistas propusieron a la molécula CD39 como un biomarcador de esta población particular.
¿Qué es un biomarcador?
Son aquellas sustancias utilizadas como indicador de un estado biológico. Debe poder medirse objetivamente y ser evaluado como un señalador de un proceso biológico normal, estado patogénico o de respuesta a un tratamiento farmacológico.1
La directora del grupo, Carolina Montes, explicó los puntos destacados del avance científico.
Si bien la ectoenzima CD39 es muy conocida ya que participa en muchos procesos (y se sabía que se expresa en linfocitos TCD8 en inflamaciones virales crónicas), nunca había sido descrita en linfocitos T de pacientes con cáncer.
La molécula participa en la generación de un microambiente supresor; es decir, un microambiente que suprime la respuesta inmune del organismo. De esa manera da chances al tumor de crecer y desarrollarse.
El descubrimiento permite identificar a dicha población de Linfocitos T CD8 que tiene un papel fundamental en la respuesta inmune frente al cáncer.
Los científicos estudiaron que funcion cumplian las células mencionadas. Si actuaban tratando de eliminar la célula tumoral o si, por el contrario, favorecían el desarrollo tumoral.
La identificación de la molécula en los linfocitos lleva a pensar si el paciente es o no candidato para las inmunoterapias. Asimismo, ayudará a determinar si un paciente está respondiendo favorablemente.
Tras ello, otros equipos de investigación internacionales descubrieron que estos Linfocitos son específicos para antígenos tumorales, es decir que pueden matar al tumor.
¿Cómo se desarrolló el estudio?
Comenzaron con modelos experimentales en ratones. Luego establecieron una colaboración con médicos cirujanos del Hospital Rawson de Córdoba.
Eso posibilitó que pudieran corroborar (en pacientes con cáncer de mama) las observaciones que hicieron en el laboratorio.
Además tienen un convenio con el Instituto Marie Curie, de Francia. Así, una de las becarias del equipo viajó e investigó lo mismo en pacientes con cáncer de mama y con melanoma.
El equipo está integrado por Fernando Canale, María Ramello, Nicolás Núñez, Cintia Araujo Furlan, Sabrina N. Bossio, Melisa Gorosito Serrán, Jimena Tosello Boari, Andrés del Castillo, Marta Ledesma, Christine Sedlik, Eliane Piaggio, Adriana Gruppi, Eva V. Acosta Rodríguez y Carolina L. Montes (directora).
Asimismo el proyecto está publicado y se encuentra en inglés. Pueden acceder en el siguiente link: CD39 Expression Defines Cell Exhaustion in Tumor-Infiltrating CD8+ T Cells.
Fuente: UNCiencia