Usar mucho el teléfono celular puede aumentar la papada
Así mismo estudios hechos en Estados Unidos y Japón indican que las pantallas azules pueden traer cambios fisionómicos, celulares y psicológicos.
Estudios realizados en Estados Unidos y Japón indican que los dispositivos tecnológicos, en especial los celulares que rara vez tenemos lejos nuestro, pueden causar problemas en la fisonomía, las células y psicológicos.
Las personas agachamos la cabeza un aproximado de 150 veces por día para ver el teléfono móvil, pasando un promedio de 18 hs y 12 minutos diarios frente a la pantalla. Esta tendencia incrementó un 90% en los últimos 10 años y se cree que seguirá aumentando.
Ese tiempo se traduce a nivel corporal en un fenómeno conocido como “cara de smartphone”. Esto sucede por la falta de elasticidad en la piel y músculos del mentón formando la famosa papada.
Para eso especialistas recomiendan ejercicios; buena alimentación evitando comida chatarra, grasas saturadas o azúcares y beber agua para ayudar a mantener la salud y elasticidad de la dermis.
Por otro lado, el trabajo realizado en EEUU señala que exponerse a un alto nivel de luz azul, emitida por las pantallas, podría generar alteraciones en las funciones celulares.
“La exposición excesiva a la luz azul de los dispositivos cotidianos, como televisores, ordenadores portátiles y teléfonos, puede tener efectos perjudiciales en una amplia gama de células de nuestro cuerpo, desde las células de la piel y de la grasa hasta las neuronas sensoriales” explica la doctora Jadwiga Giebultowicz, profesora del Departamento de Biología Integrativa de la Universidad Estatal de Oregón.
La profesora Aya Hatano, de la Universidad de Kyoto, destaca los cambios a nivel mental: “Nuestra investigación indica que las personas tienen dificultades para estimar cuán atractivo puede ser el pensamiento. Esto puede explicar por qué prefieren mantenerse ocupadas con dispositivos y otras distracciones, en lugar de tener un momento de reflexión e imaginación en la vida cotidiana”.
Por ello afirma que las personas subestiman estar a solas con su mente y están más tiempo frente a sus dispositivos “soñando despiertos”.
Fuente: Infobae.