Carlos Borgiattino: “Yo tengo un Tinnitus que no se me va a curar”


Manifestó sobre su enfermedad: “Quiero que la gente entienda que las consecuencias de no llegar a un tratamiento a tiempo pueden llegar a ser catastróficas”. En una entrevista extensa, contó sobre un proyecto para ayudar a vecinos de Río Primero con la misma enfermedad, cómo fueron estos años alejados de la política y respondió sobre cual es su opinión de Argentina hoy, la decisión del radicalismo para con Prunotto y Benedetti y cerró con una reflexión para su comunidad rioprimerense.


El pasado martes, el ex intendente de Río Primero, Carlos Borgiattino, visitó el programa radial Hits en Dos y habló sobre su vida personal, cómo es estar alejado de la política y la enfermedad que lo afecta: el Tinnitus.

En ese marco, luego de bastante tiempo alejado de los medios y siendo el político más querido de la localidad que gobernó por años, respondió el interrogante de muchos: ¿Qué es de su vida? ¿Vive en Río Primero o se mudó?

Contó que parte de su familia vive en Córdoba, que una de sus hijas esta en pareja y por eso viaja mucho, cómo así también por controles de su salud. Pero el siempre siguió viviendo en Río Primero. Nunca se mudó.

Agradeció a Dios seguir en su casa y su cuadra, a la cual le tiene cariño: “Yo la verdad que amo la vida de pueblo; amo mi Río Primero como el primer día”, sostuvo.

¿De que se trata la enfermedad de Tinnitus que transita de por vida y como inició en él?

En 2018, luego de un evento que no recuerda porqué fue causado, Borgiattino comenzó a tener un zumbido en el oído.

El ex mandatario contó que con el correr del tiempo, y de ver a distintos especialistas, le detectaron tinnitus o acúfenos.

Explicó que al principio tomó la enfermedad como una simple molestia en su oído. 

Sin embargo, con el tiempo fue haciéndose cada vez más fuerte y presente, llegando a recurrir a diferentes tipos de profesionales y medicinas alternativas.

A su vez, se encontró con varias personas que padecían lo mismo, formándose una especie de grupo de ayuda virtual.

Desde su experiencia personal, y con testimonio de dicho grupo, detalló que el zumbido suele ser durante las 24 horas del día.

Este problema auditivo puede provocar sordera, diferentes tipos de afecciones psicológicas, distintas reacciones, entre otras situaciones.

“Yo solamente voy a hablar como persona que lo sufre” afirmó, sin querer utilizar términos de explicación médica. El objetivo, es contar su vivencia.

Detalló que en su caso, el tinnitus es permanente. Algo que no sucede en todos por igual, puede o no ser de esa manera.

“Yo tengo un tinnitus que no se me va a curar”, dijo y explicó que él llegó hasta la utilización de un audífono en su oído.

“Cuando el audífono se encuentra en su normalidad en el oído en el cual tenes el zumbido, aparece en el otro”, indicó sumando que se trata de una situación particular. 

Por esa razón, expuso que debe ser tratado no solo por el otorrinolaringólogo, sino también por un neurólogo. 

“Es algo complejo de poder sobrellevar y de encontrar en algunos casos un tratamiento, o una medicación”, comentó.

En ese sentido afirmó que no todas las personas que sufren esta enfermedad son iguales.

“Lo que si se comparte es que hay gente que dice que no lo soporta” contó.

A ello agregó: “Lo que yo les puedo decir es que si aprendemos a convivir con ese zumbido, podemos llegar a soportarlo y nuestra vida tiende a ser lo más normal posible”.

Para ello, sostuvo que hace falta una contención familiar, espiritual y un tratamiento médico que trate de saber si ese zumbido hace que se pierda la audición.

Afirmó que uno convive y trata de controlar el problema. Una de las cuestiones es que cuando uno es diagnosticado, va teniendo diferentes consecuencias.

En eso surge a veces la necesidad de leer los labios y otros métodos para entender mejor: “Uno es resistente a sus debilidades, uno aprende a hablar más lento porque escucha más lento”, dijo recordando su experiencia personal. 

“No todos tenemos un mismo tinnitus” afirmó y explicó que todos tienen un zumbido, algunos más lento, otros más suave, más fuerte o intenso.

Otros son a la mañana cuando uno se levanta y después disminuye, otros lo controlan con dieta, con medicación, otro yendo a un profesional que le quite la cera del oído.

“No siempre una enfermedad como la tinnitus puede ser para toda la vida, como en mi caso, hay algunas que pueden ser reversibles” contó y agregó: “Todo depende de las causas”.

En cuanto al origen de la enfermedad, sabe que hay personas que han tenido tinnitus por la infección de un molar, o porque nunca se hicieron controles con un especialista, o surgieron por un medicamento, o personas que estuvieron expuesta a sonidos intensos durante toda su vida. 

Otras como posiblemente su caso, que haya sido provocada por un accidente cerebro vascular interno, leve y que afectó el oído.

“Hay diferentes causas. No hay algo que uno se sienta enmarcado en esa línea de ruta o esa escalera”, dijo.

Por otro lado, comentó: “El silencio se convierte en nuestro peor enemigo” pero que también aprenden a escuchar, darse el tiempo para ello, para hablar y a “valorar los sonidos de otra forma”.

En su caso particular, se siente tranquilo cuando escucha el sonido de la ducha.

En ese sentido, detalló que existen técnicas alternativas como poner música con determinado tipo de sonidos, para lograr la paz de no escuchar un zumbido.

“Uno tiene que aprender a vivir y convivir porque a mi ya me lo dijeron: ‘La enfermedad suya es incurable’” aseveró, diciendo que la medicina convencional hoy en día no tiene una solución a su problema. 

Un proyecto para acompañar y concientizar 

Varias personas de Río Primero con la misma enfermedad llegaron a su puerta y teléfono para decirle: “Yo tengo lo mismo que usted?” y “¿Usted cómo hizo?”.

Alrededor de seís personas del pueblo se acercaron a él, en busca de consejo. Aunque reveló que sabe que hay más vecinos. Aproximadamente más de diez, padecen tinnitus en la localidad.

“A todo el que me ha preguntado le cuento mi camino” dijo, afirmando que cada individuo debe hacer lo propio con lo que “mejor le pueda llegar a alcanzar a lo que es sentirse bien”.

Se dio cuenta que “el problema no era tan problemita”, en todo caso,“era algo que merecía un poco más de atención”.

Afirmó que por el tiempo que lleva con esta enfermedad (seis años), conoce casi todos los especialistas de oído de Córdoba y algunos en Buenos Aires.

Su objetivo es que este 2024, junto a un profesional (con quien ya está en contacto), se pueda organizar un encuentro en la localidad con todas las personas que sufren de tinnitus, para ayudar a convivir mejor con este problema.

Es para “quienes quizás no han encontrado una vía, una ruta, una manera de sobrellevar esta situación o en algunos casos, encontrar las maneras de poder tratarse”, expresó Borgiattino.

Manifestó que, en el proceso, no desea pasar por encima de las autoridades sanitarias de Río Primero. Por ello, pondrá en aviso a la directora del Centro de Salud, Myriam Genaro, sobre de qué se trata la iniciativa.

Asimismo, quiere abrir el diálogo entre el especialista y la doctora, para tener la “chance” de reunir a este grupo de personas para hacer un intercambio.

Esto con el fin de que quienes sufren tinnitus se sientan: escuchadas, comprendidas y encuentren su camino para sentirse mejor.

Sin embargo, afirmó que es complejo concretar la reunión debido a lo diverso de la enfermedad y la agenda apretada de los profesionales en la materia.

De igual manera, afirmó: “Yo soy un incansable en ese aspecto, así que lo vamos a lograr”.

“Quiero que la gente entienda que tener tinnitus es una afección, denominada también enfermedad, pero las consecuencias de no llegar a un tratamiento a tiempo pueden llegar a ser catastróficas”, detalló.

Indicó que cuando uno tiene un padecimiento de esta situación y no hay una ayuda, tanto médica como psicológica, terapéutica y familiar, es muy complicado sobrellevarlo.

“En ese camino me ha tocado estar con personas que tienen un pequeño zumbido, muy sobrellevable; y con personas que directamente no daban más” dijo.

Contó que en esos casos, el tratamiento llega hasta los implantes cocleares. Estos son colocados por consejo de los profesionales a personas que tienen un zumbido inaguantable, que pueda provocar una sordera.

Los mismos, son muy complicados de conseguir en Argentina y son muy caros, comentó Borgiattino. A ello sumó que hay obras sociales que los incluyen, y otras que no.

“A mi me gustaría no llegar tarde. Hace seis años que estoy y yo se que ya llego tarde a ayudar a otras personas”, se lamentó.

En ese sentido, se comprometió a que el encuentro con el especialista se pueda hacer antes o durante abril, y no se extienda más la espera.

“Con un profesional que verdaderamente entienda y les hable con las características propias de paciente – médico, como corresponde”, afirmó y añadió:

“Alguno pensará ‘¿Y por qué uno no se junta entre sí?’ Porque muchas veces esta cuestión afecta a la parte psicológica, entonces uno no es un profesional que le pueda dar  un consejo que muchas veces sea determinante en la otra persona. Uno también tiene que saber que llega hasta cierto lugar”. 

“Podemos intentar ayudar, pero siempre lo mejor es llegar a un profesional médico que sepa orientar a la persona que tiene una afección al lugar indicado”, aseveró.

En ese sentido, contó que pensó en un espacio de autoayuda, pero quiere hacerlo con tiempo, pensado y luego de charlas con la Dra. Genaro que recientemente asumió como directora en el Centro de Salud.

Sobre ella, afirmó que es una excelente profesional y quizás en la charla, se le pudiera ocurrir una “mejor solución”.

Quiere crear un acercamiento y “que la charla no termine en charla, sino en algo que realmente valga la pena”.

“La idea es comenzar algo para que continúe”, expresó.

Afirmó que tardó cinco años en llegar a un punto medio, con el conocimiento que tiene sobre el tema, acompañamiento médico y obra social.

“A mi me gustaría que alguien que esté en la misma situación que yo no tenga que pasar por todo esto”, dijo y sumó: “Nos animemos a decir yo también tengo esto, cómo hicieron ustedes para llevarlo”.

“Y sobre todo, si alguien lo tiene recién ahora que no termine con una sordera”, dijo, afirmando que no todos tienen la posibilidad de ver a un especialista. 

“Sería de muy mala si yo no alertara al servicio médico local de que esto existe, de que hay una posibilidad, de cómo lo podemos hacer” afirmó.

Y finalizó el tema diciendo: “Yo solamente tengo la iniciativa pero el camino lo hacemos entre todos”.

Últimos días en la intendencia

“Fueron muy especiales”, afirmó Borgattino sobre cómo fueron sus últimos días en la municipalidad, confesando que es una palabra que mezcla todos los sentimientos de ese momento.

Con cierta nostalgia y brillo en los ojos, recordó que le costó distanciarse de la institución para la que trabajo tantos años, y dijo que es difícil alejarse del lugar que uno quiere.

Expresó que la vida no te prepara para muchas cosas, sino que las vas descubriendo día a día.

Recordó que el 2018 le pidió a la junta médica que seguía su tratamiento, que lo dejaran terminar su mandato. Ya que en ese año, los profesionales le habían pedido abandonar la actividad municipal.

En ese sentido, afirmó que él como radical cree, desde la presidencia de Raul Alfonsin, en que la palabra renuncia no está dentro de sus raíces: “La palabra es continuar hasta el último día”.

Sin embargo, aclaró que llegó al 2019 muy decaído con su salud, sosteniendo que estos cuatro años no ayudaron.

Cuando salió del municipio, los problemas narrados en párrafos anteriores eran el triple de graves de lo que están hoy, contó el ex intendente.

Le costaba mucho concentrarse y vocalizar, por lo que cayó en la tendencia de aislarse y evitar los lugares donde sintió que incomodaba, a la vez que se sentía incómodo.

Afirmó que uno de sus “mayores problemas” fue “encerrarse” en sí mismo.

Cuando la gente le dice que no se le ve, lo admite. Esto debido a que no tiene una vida social activa. 

“Pero me encantaría volver a una vida social fuera de la política, que me permita estar en contacto con los vecinos”, aseguró.

En ese sentido, manifestó que sigue conociendo muchísima gente, algunos que no conoce más (como los niños que hoy son jóvenes o adultos).

“Me sigo quedando con nuestra filosofía de vida, de Río Primero, esperando siempre que todos intentemos pensar para adelante, en comunidad, en unidad y seguir”, expresó, mencionando que no descarta tener alguna participación social más.

Por otro lado, dijo: “Puedo asegurar que me he llenado de lágrimas cuando me ha tocado escuchar algunas cosas”.

A ello agregó: “Uno es alguien cuando tenes un cargo, y eso otro cuando no podes utilizar ese cargo para ayudar a la gente. De eso me terminé de dar cuenta en este tiempo”.

Manifestó que “cuando sos alguien” bastaba con una presentación o una llamada para dar la mano a alguien en cuestiones de salud o social. 

Por el contrario, dijo: “Cuando no sos alguien, las puertas de un ministerio no se abren” y sumó: “No poder ayudar fue lo que más costó en este tiempo”.

De igual manera, agradeció que los vecinos lo respetaron muchísimo en estos últimos cuatro años. Sin embargo, al escuchar de alguien que necesitaba ayuda y no poder brindarla, le afectó bastante. 

A pesar de eso, contó que a través de amigos que tenían la posibilidad de dar una mano, le trasladó las situaciones. Afirmó que eso lo hizo sentir un “poco mejor”.

“Siento que en la vida si uno no está verdaderamente para dar una mano, la vida no tiene sentido”, expresó.

Sobre cómo fue “dejar de ser alguien” o que “el teléfono deje de sonar”, contó que no fue fácil.

Destacó a su familia por ser un gran soporte para él en los últimos cuatro años.

“Yo sigo siendo un municipalista en mi corazón” dijo y agregó: “Durante 28 años sábados, domingos y feriados que había que ir, lo hacía con gusto. A mi no me obligó nunca nadie a ir al municipio, ni a asumir cada cargo que yo asumí”.

“Si me obligaron a salir” lanzó, refiriéndose a su enfermedad. “Yo no salí porque quise”, sumó. 

Confesó que a veces se pregunta: “Si pudiera volver el tiempo atrás, sabiendo lo que pasó, ¿qué hubiese hecho en el 2018?”.

Asimismo, contó que le hubiera gustado que muchas personas allegadas a él, parte de sus amistades y familia municipal, no hubieran tenido que pasar por situaciones en las que le hubiera gustado estar presente.

“Es tal vez la espina mas onda que tengo clavada”, expresó sobre el tema.

También pensó en que, si hubiera seguido cuatro años más como intendente, podría haber dejado las cosas “un poquito más ordenadas de lo que uno hubiese querido ordenar”.

“Yo al dejar la muni dejé mi vida ahí”; dijo con pesar, añadiendo: “Por más que pasen los días uno no puede olvidar los pasos recorridos, ni las personas con las cuales uno compartió hasta los momentos más importantes de su vida”.

“Si bien hay cosas que no me puedo perdonar, sé que cada persona tiene que hacer y rehacer su vida; y también me toca a mí” manifestó y dijo: “Cada día que pasa uno también intenta que se abran nuevas expectativas para poder enfocarse en el día de mañana”.

“Con fé y esperanza tenemos que aprender a soñar. El mañana siempre está, en Dios y en la Fé que tengamos en Él”, aseguró. 

Su opinión sobre la situación actual de Argentina

Desde su posición como militante, el ex intendente afirmó: “Hoy nos toca ver como una conjunción de diferentes personas que alguna vez han militado en diferentes lugares, han conformado una alianza política que es la que nos está gobernando”.

Asimismo, recordó que un 56% eligió un cambio. 

En ese sentido, dijo que ese porcentaje “no es que estaba convencido de que votaba a tal persona porque era la salvación de la Argentina”; sino que “votaba algo que era diferente a lo que se proponía”.

“No nos queda otra más que apoyar de alguna forma, dentro de nuestras posibilidades, las medidas que se toman, aunque no estemos de acuerdo”, expresó.

A su vez, se lamentó y recordó el dicho: “Siempre pagan justos por pecadores”, en relación a diferentes cuestiones.

“Nos está pasando en nuestro país”, afirmó y mencionó que cree que tanto partidos radicales y peronistas han gobernado en la historia, no se ha podido llevar a la Argentina al lugar que se merece.

“Hoy le toca a un grupo de personas sin respaldo político, pero sí con el respaldo social, de marcar un destino diferente”, manifestó.

A ello agregó: “¿Y por qué no darle la oportunidad?”.

“El tema es que Argentina es Argentina, no somos fáciles los argentinos” dijo y con con tono de broma agregó: “Quisiéramos que la crisis dure una semana, un mes y que después vuelva a ser una nuevamente panacea y comamos asado todos los viernes, nos juntemos con los amigos y la yerba este barata para tomar mate”.

Seriamente, agregó: “Tal vez nos tocó el tiempo en que la crisis es verdaderamente crisis; y que nos toque todavía mucho más tiempo para que esta se trate de sobrellevarla de la mejor forma”.

“Lamentablemente la crisis la terminan pagando los que menos tienen”, se lamentó y dijo: “Es ahí donde a mi me duele, porque uno quisiera que hagamos sacrificios pero no me gustaría que el sacrificio termine cortando por la parte más débil de la sociedad”.

Su opinión sobre la expulsión de Prunotto y Benedetti de la UCR

Ante la pregunta, respondió posicionándose en el lugar de “si yo hubiese estado allí” ya que afirmó: “No puedo juzgar la actitud del tribunal de ética”.

“Seguramente ellos han tenido diferentes tipos de atributos justificativos y demás para tomar esa decisión”, agregó. 

Luego de la aclaración, expresó: “A mi me hubiese gustado escuchar a Myriam, a Gustavo, a Marcelino Gatica (quien pasó por lo mismo) cual habían sido las medidas y si realmente ellos dejaban de ser radicales para asumir un cargo”

Afirmó que hay una interpretación que “hacemos nosotros” del otro lado, pero “no sabemos lo que realmente pasó”.

En ese sentido, aclarando nuevamente, dijo que si hubiese sido su decisión, no los habría expulsado. El todo caso, los hubiera suspendido.

“Por una cuestión también que tiene que ver con la historia política que tiene cada uno de ellos, nuestra historia partidaria” dijo y agregó: “También tiene que ver con la historia partidaria futura”.

“Porque si no cualquier persona que esté en un partido se postula para el partido con el cual somos contrincantes, entonces es como que todos somos todo, todos vamos a cualquier lado. Hay que tomar una actitud que tiene que ser éticamente aprobada por la sociedad también”, argumentó.

Comentó que al partido le correspondía tomar una decisión sobre el accionar. Sin embargo, repitió que en lo personal hubiera dado un paso más atrás: “No se si la expulsión es tal vez la decisión más justa”, dijo afirmando que hablaba desde la ignorancia.

Recordó que él, en su momento, trajo a Río Primero al presidente Mauricio Macri antes de la convención de Gualeguaychú, donde se conformó la alianza.

“Yo hubiese sido expulsado más del partido radical”, confesó y añadió:

“Imaginense porque tengo que decir lo que acabo de decir, porque uno también estuvo en lugares parecidos a los que estuvo Myriam Prunotto y Gustavo Benedetti”.

Sin embargo, agregó: “Si en el partido me hubieran dicho: ‘Mira vos tenes que dejar de hacer todo lo que haces porque sino te expulsamos’, yo no sé qué hubiese sucedido”.

Un mensaje para los vecinos de Río Primero

Ante la solicitud de una reflexión para los ciudadanos de la localidad, en estos tiempos donde la grieta está muy presente, Borgiattino manifestó el siguiente anhelo:

“A mi me encantaría como persona que ha estado con la misión de que Río Primero crece solamente unido, que entendamos que la única forma que tiene nuestra localidad de convertirse en el faro regional que una vez intentamos ser, es cuando todos intentamos ir para un mismo lado”.

Agregó a ello: “Esto no implica hacer lo que una persona diga lo que hay que hacer, porque Río Primero es el conjunto de más de 20 instituciones que tienen su propia independencia”.

“En realidad lo único que tenemos que hacer es coordinar, que cada institución siga teniendo esa independencia, esa pluralidad, esa neutralidad; pero también la participación para pensar no en forma personal, sino en función de la comunidad”, continuó y detalló: “Las instituciones son también parte de la sociedad”.

“Por lo tanto, si intentamos ser el pueblo que queremos ser, el único camino es trabajar juntos”, aseguró.

Afirmó que cada institución de Río Primero es un aplauso a su historia, porque han tenido muchos logros: “Pero esos logros solamente se pudieron hacer cuando las personas pensaron en los demás y no en sí mismos”, aseveró.

“Hoy es la única manera que nos queda. Aquellos por los cuales nos hemos identificado y si realmente recuperamos nuestra esencia y dejamos de lado los egocentrismos y las centralidades, creo que Río Primero va a continuar ese camino que nos costó muchísimo intentar hacer”, dijo el ex intendente.

“Verdaderamente, yo creo que estamos destinados a ser ese pueblo faro de toda la región”, cerró.

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